Estoy viviendo con la familia de mi hermana mayor los fines de semana, sus hijos son adolescentes, esta semana se prolongo la convivencia debido que la Feria de Animas Trujano, San Bartolo Coyotepec dura una semana, esta madrugada al llegar a casa antes de acostarme, a lado de la cama hay un librero algo polveado, debido que casi no estan en casa, revise el stan de libros, uno por uno, y encontre mi primer libro que leí completo y es el principíto de Antoine de Saint-Exupery, la parte del zorro y el principito es mi favorita, toda la historia lo és, pero es la que más me encanta, cuando convivia con Fernando le comente porque no queria enamorarme, no queria ser domesticada, y mucho menos extrañarlo, pero el abrió esa posibilidad maravillosa de vivir en pareja, en el caso de ojos de gato fue una ilusión de una niña de 10 años, al conocerlo fue fatal, él me dejo en un un callejón oscuro, donde no quize salir 4 meses, creyendo que eso merecía por mi necedad, creí que era un caballero, que el amor era doloroso, pero no es así, el hecho era que era un hombre que no protegía, ni siquiera daba amor.
Ese mismo día que caí en ese callejón oscuro, lloraba y diálogaba con mi Dios, le decia que aprendi la lección, que no era necesario tanta humillación, esa misma noche al final de esa callejón, un jóven con un gran sonrisa me observaba, quize insultarlo, porque odiaba su sonrisa, como podia haber alegria en una situación de desgracia, se acerco y me levanto, caminamos, nos detuvimos en un lugar donde pudieras conversar, es ambicioso, porque lo és, algún momento me molesto su materialismo, le gusta Mérida, de repente terminanos la conversación, se fue, se esfumo esa noche, no recuerdo que hacia donde se fue, sencillamente desapareció, segui sentada hasta que amaneciera, tome un tonic, esa mañana desperte a las 7:30, aún seguía ebria, ese día odie estar así, porque solo fueron 3 tonics :-D
Otro día regrese al callejón, espere verlo... y de nuevo encontre esa sonrisa, pláticamos, ese día deslice mis dedos en su espalda, me gustaba su piel lisa, ahi empezaba una nueva historia, aquel hombre es: Fernando Franco.
::Escucho a Jerry Rivera. Vuela muy alto. mp3::
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